sábado, janeiro 22, 2011


 Narco-tráfico 

Dado o seu interesse a seguir se transcreve, nas versões em língua castelhana e em língua inglesa, um artigo publicado na imprensa Mexicana (jornal “Excelsior” edição de 9 de Julho de 2010). Apesar da sua antiguidade, o texto não perdeu minimamente a respectiva actualidade.

Spanish  & English 
Versión en  Español: 
    
   El paraíso de los  narcotraficantes
 *Francisco Martín Moreno




¿En Estados Unidos, el mercado de  enervantes más codiciado de la Tierra, no hay narcos destacados,  cuyos nombres deben ya formar parte de la leyenda criminal de su  país?  
 
¿Usted conoce el nombre de un solo  capo norteamericano de nuestros tiempos?  
 
 
Por  supuesto no me refiero a los famosos "gangsters" de los años de la  prohibición alcohólica en Estados Unidos como sin duda los fueron  Capone, Dillinger y Frank Nitti entre otros tantos personajes del  bajo mundo que encontraron en nuestros vecinos del norte el caldo  de cultivo necesario para desarrollarse hasta alcanzar "prestigio"  internacional... 
 
 Nosotros conocíamos a  García Abrego, a Caro Quintero, al Güero Palma, al Señor de los  Cielos, a los hermanos Arellano, entre otros líderes de nuestro  hampa tercermundista. 
 
 
Pero, insisto, ¿y en  EU, el mercado de enervantes más codiciado de la Tierra, no hay  narcos destacados, cuyos nombres deben ya formar parte, a mucha  honra, de la leyenda criminal de su país pues trafican con drogas  con un valor superior a los 500 mil millones de dólares?  
 
 ¿Ningún apellido destaca por su eficiencia  y popularidad o simplemente porque ya no hay narcotraficantes para  vergüenza de la larga tradición criminal  norteamericana?
 
¡Ya sé! En Estados Unidos  las drogas se trafican "solitas". 
 
 Los  enervantes son dejados en las fronteras norteamericanas por  "camellos" mexicanos o latinos y llegan "solitos", como por arte  de magia, a las manos de los consumidores.  
 
Del total de la mariguana que se consume  en dicho país, por ejemplo, 35% es producido en Texas, Arizona y  California sin que jamás se localice un sembradío, se incineren  los enervantes de cara al público, se recluya a los responsables  en una prisión federal y se rematen y adjudiquen sus propiedades  al mejor postor. 
 
 Sucede que la mariguana  se siembra solita, se corta solita, se distribuye solita y el  dinero obtenido se lava solito... 
 
¿No es  una verdadera maravilla? 
 
Nunca escuchamos  que se aseste un rudo golpe al narcotráfico en EU tal y como se  asesta, sin duda, en México, en forma por demás recurrente.  
 
Nunca vemos fotografías de capos  norteamericanos arrestados y enfundados en sus chamarras azules  del FBI con las manos y pies esposados, chalecos y cascos  antibala, además de una numerosa escolta policiaca para evitar  cualquier atentado en contra de su vida que impidiera la delación  de la identidad de sus socios y  movimientos...
  
En México, la captura de los  "famosos" capos ocupa las primeras planas de los diarios de la  República, además de generosos espacios radiofónicos y televisivos.   

Es evidente el  esfuerzo mexicano por ganar esta batalla en contra de la  producción y venta de enervantes. 
 
Sólo que  la batalla difícilmente la ganaremos si en Estados Unidos se  venden impunemente 500 mil millones de dólares de narcóticos en  las calles sin que nadie vea ni sepa ni oiga nada, absolutamente  nada, puesto que nuestros vecinos "puritanos" nunca atrapan a un  capo ni se publica por ende su captura en la prensa ni se queman  depósitos incautados de estupefacientes ni mueren soldados ni  agentes judiciales ni jueces ni procuradores ni se rematan  propiedades ni se revelan los nombres de las autoridades  implicadas en el narcotráfico. 
  
Nada, no se  sabe nada...
  
¿Por qué no se sabe? Muy  sencillo: porque una parte insospechable de autoridades  ejecutivas, legislativas y judiciales federales y estatales  norteamericanas está en la nómina de los capos.  
 
Si nada se hace y nada se sabe es porque  desde secretarios de Estado para abajo (sálvese el que pueda),  gobernadores, legisladores, senadores especialmente jueces,  periodistas, policías de toda índole, agentes del FBI y de la DEA  y hasta la famosa y no menos temida Patrulla Fronteriza, todos  podrían estar profundamente involucrados con los narcotraficantes  realizando jugosos negocios tal y como lo hicieron ya 
en los años de la prohibición.  
 
No hay nada nuevo bajo el sol.  
  
Menos lo va a haber ahora cuando un grupo  de maleantes goza de más poder que el Estado mismo. Nunca en la  historia de la humanidad una pandilla de delincuentes había tenido  tanto dinero como para poder comprar autoridades, periodistas y  países enteros si así lo decidieran. 
 
Todo  ello gracias a que EU pone los dólares para que esto sea posible.  
 
¿Qué prefieren los capos a cambio de la  heroína: mexican pesos or american dollars? Está clarísimo, ¿no?  ¿Cuál soberanía de un Estado cuando a un capo no se le puede  juzgar en su país de origen porque puede desestabilizarlo con  consecuencias funestas para millones y más millones de personas?   
  
¿No estamos frente a un novedosísimo  fenómeno de poder en manos de un solo individuo?
¿Dónde están  los capos norteamericanos?
¿Por qué no se inicia la persecución en  EU de los grandes narcotraficantes? 
 
 Yo, yo  sé, yo: porque ni los consumidores ni las autoridades ni los  narcos ni la prensa quieren que se sepa quiénes son.  
  
A todos les conviene el negocio. Todos  están coludidos. 
  
Mejor, mucho mejor,  culpar a México de todos sus males...



 English  version:  
 A  Trafficker’s Paradise 
   
 In the United States, the most  sought after drug market on Earth, are there are no outstanding  drug kingpins with names that make for legends? 
   
 *By Francisco Martín Moreno   

Do you know the name of a single  American drug kingpin of our times? 
 
 
I am of course not referring to  the infamous "gangsters" of the prohibition era in the United  States, such as Capone, Dillinger and Frank Nitti (among so many  underworld characters) who found in the United States the fertile  ground necessary to develop and reach international  “prestige”.
 
We knew García Abrego, Caro  Quintero, “El Güero Palma”, the “Lord of the Heavens”, the  Arellano brothers, etc. among other leaders of our meager  underworld. 
 
 
But I insist: In the US, the most  coveted drug market on Earth, are there are no outstanding drug  Kingpins (whose names must now form a proud part of the criminal  legend of their country), when they deal in a drug business worth  over 500 billion dollars? 
 
 
Is there no last name that stands  out for its efficiency and popularity or is it simply that there  are no drug traffickers to shame the longstanding American  criminal tradition? 
 
 
I know! In the US, drugs are dealt  “by themselves”. 
 
 
The drugs are dropped off at the  border by Mexican or Latin American “mules” and reach (as if by  magic) the hands of consumers “by themselves”.
 
 
Of all the marijuana that is  consumed in that country for example, 35% is produced in Texas,  Arizona and California without the authorities ever finding a  plantation, any drugs incinerated in public, or anyone being  placed in federal prison and their assets sold at auction to the  highest bidder. 
 
 
I guess  the marijuana was  planted by itself, harvested by itself, distributed by itself and  the resulting proceeds laundered by themselves... 
 
 
Is this not truly amazing?  
 
 
We never hear of a harsh blow  being dealt to drug trafficking in the United States as is  commonly done in Mexico, in a consistently recurring  form.
 
 
We never see photographs of  American drug Kingpins arrested and covered in blue FBI jackets,  hands and feet in shackles, wearing bulletproof vests and helmets,  with a huge police escort to prevent an attacks on their life that  could prevent them from informing of the identity and activities  of their associates... 
 
In Mexico, the capture of "famous"  drug Kingpins occupy the front page of newspapers, besides  receiving ample Radio and Television coverage. 
 
 
We publicly display the  incineration of narcotic drugs as soon as they are found.   Photos of heroic soldiers fallen while fighting thugs are  published. We have pictures of former State prosecutors massacred  at their doorsteps while engaged in private law practice after  retiring from fighting crime. 
 
The multiple and ostentatious  properties seized from the Kingpins are a matter of public  knowledge. 
 
The efforts of Mexican soldiers to  win this battle against the production and sale of drugs are  evident. 
 
Only that battle will hardly be  won if in the US the unhampered sale of 500 billion dollars’ worth  of narcotics in the streets continues with no one seeing or doing  anything. Since our "Puritan" neighbors never catch a Kingpin, no  arrests are announced, no soldiers or drug agents or judges or  prosecutors die, no assets are seized and no names of corrupt  government officials are published. 
 
Nothing, no one knows anything...  
 
Why doesn't anyone know? Very  simple: because an incredible number of members of the State and  Federal Executive, Legislative and Judicial branches of government  are on drug Kingpin’s payrolls.  
 
 
If nothing is done, and nothing is  known it’s because from the Secretary of State on down, Governors,  Legislators, Senators and especially Judges, journalists, police  officers of all kinds, FBI and DEA agents up to and including the  famous and not the least feared Border Patrol, everyone could be  deeply involved with drug traffickers and making juicy profits  just as they did during prohibition. 

There is nothing new under the  Sun. 
 
Even less now, when a group of  thugs has more power than the State itself. 
Never in the history of mankind  has a gang of criminals had so much money as to enable it to buy  authorities, journalists and whole countries if it so  decided.
 
All this thanks to the US, who  provides the dollars to make this possible. 
 
What do drug Kingpins prefer in  exchange for heroin, Mexican pesos or American dollars? It’s quite  clear, isn't it? What sovereignty does a State have when a drug  Kingpin can’t be judged in his country of origin because doing so  could bring about the destabilization of the country with  disastrous consequences for millions and millions of people?   
 

 Are we not facing a  newfound power phenomenon in the hands of a single individual?   
Where are North American drug  Kingpins? Why not I start the prosecution of major drug  traffickers in the United States? 
 I know: Because neither consumers  nor authorities nor the Kingpins nor the press want you to know  who they are. 
 
 This is good business  for everyone.  Everyone is involved. 
 
Better, much better to blame  Mexico for all its problem...

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